• Aquel adiós a Ernesto Sábato - Argentina Tango / España

    Querido Eduardo:

    Conmovido por el fallecimiento de uno de nuestros más universales escritores, Ernesto Sábato, pensé en escribir algún pensamiento al respecto. Realmente no me siento con la autoridad correspondiente para hacer algo que enriquezca lo que tanta gente capaz está volcando en páginas de periódicos de todo el mundo y en otros medios. Por suerte recibo este material que me manda Luis Alposta de sus "Mosaicos Porteños" con el recuerdo de Ernesto Sábato y sus vivencias junto al compatriota que se nos fue. Te ruego contemples la posibilidad de publicarlo.

    Un fuerte abrazo

    Rodolfo Ghezzi 


    Acerca de Ernesto Sábato

    Por Luis Alposta – Mosaicos porteños  

    El Viejo Almacén, por iniciativa de Edmundo Rivero y mía, en la primavera de 1983 decidió galardonar con el premio “Pedro de Mendoza” a los más destacados artistas, deportistas y científicos del país. Dicho galardón, destinado a convertirse en referente y verdadero acontecimiento para la comunidad cultural, deportiva y científica de Buenos Aires, consistió en una escultura, obra del artista Néstor Muzzopappa, en la que se representa a Pedro de Mendoza.

    El 26 de septiembre de 1983, uno de sus acreedores fue el maestro Ernesto Sabato, quien ha fallecido este 30 de abril 2011 a la edad de 99 años.

    Ernesto Sabato, escritor, ensayista, físico y pintor, autor de tres novelas célebres, El Túnel; Abbadón, el exterminador y Sobre héroes y tumbas, era de 1911, así como Edmundo Rivero, Juan Manuel Fangio y mi padre.

    Cuando en 1979, la topadora municipal arremetió contra una parte del edificio del Viejo Almacén, uno de los presentes, el más enojado, fue, precisamente, Ernesto Sabato, quien no por casualidad se encontraba allí.
    Más tarde, Rivero manifestaría su reconocimiento en estos términos: "Con tremendo esfuerzo, el Viejo Almacén volvió a levantarse. Todavía no me explico cómo pude hacerlo, pero pienso que Sabato fue uno de los que me dio coraje".

    Entrega de los premios “Pedro de Mendoza”. De pie: Luis Alposta y Edmundo Rivero. Sentados: Ireneo Leguisamo, Ernesto Sabato, Sigfredo Pastor, Rosita Quiroga y Joaquín Gómez Bas. Fotografía del Dr. Luis AlpostaQuerido Rodolfo,

    Has expresado muy bien algo que también a mi me ocurre en estos momentos. ¿Quién es uno para escribir sobre Ernesto Sábato? El haberlo leído es normal para argentinos de nuestra generación (y espero que lo siga siendo para las futuras), pero no es credencial suficiente.

    Sin embargo voy a relatar esto: terminado el Normal 3 en Rosario, ya publicitario y locutor en ciernes, fui durante menos de dos años a la Facultad de Filosofía y Letras de la calle Entre Ríos, frente al Centre  Catalá, para hacer la carrera de filosofía precisamente.

    No fueron muchos mis logros pero hay momentos que me quedaron grabados. Uno de ellos fue cuando un compañero trajo para comentar entre nosotros, una revista literaria de varios años atrás,  con un artículo firmado por Ernesto Sábato.

    Contaba el escritor que cuando murió Evita él estaba en Cafayate, creo recordar. Fue para dar una conferencia y, como el país se detuvo, tuvo que quedarse allí unos días pues se pospuso la fecha. Con otros colegas salió un día a caminar por senderos pedregosos del entorno de la ciudad salteña. Se alejaron bastante. En un momento, al torcer por un caminito, se encontraron con un altar improvisado con la foto de Eva Duarte de Perón y unas mujeres del lugar rezando y llorando, con velas en las manos.

    Y reflexionaba Sábato, conocido antiperonista…. “En ese momento me di cuenta que, si estas mujeres que ni idea tenían siquiera de donde estaba Buenos Aires, la Casa Rosada, la política ni nada… se encontraban allí llorando como huérfanas, algo debía haber en Evita; que tenía que revisar mi manera de pensar, considerar que su mensaje había calado hasta los lugares más remotos del país” (es la idea de lo leído aquel día, no palabras textuales de Sábato).

    Sabido es, querido Rodolfo, que venimos de un país donde somos especialistas en posiciones antagónicas totales y determinantes por gran parte de nuestra población. Me he quedado con esa reflexión de Sábato, para tenerla en cuenta viniendo de quien vino, un pensador de verdad. Un hombre que pensó la vida.

    Me permito seguir la línea del Dr. Alposta e incluir un tango que debería estar en muchos repertorios y del que Edmundo Rivero ha hecho, una vez más, una creación:  “Amigos que yo quiero”, de Eduardo Gutiérrez, oportuna elección.



    Alcemos nuestras copas aquí en el viejo bar en el adiós a Don Ernesto Sábato.

    Eduardo Aldiser          
    Argentina al Mundo recordando a las grandes figuras de la cultura argentina

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    Lista de comentarios

    Susana Luchelli05/05/2011 22:22:56

    Muy buen artículo el de ustedes. Sobre todo ubicando a Ernesto como lo que fue: un gran escritor, un argentino que sufrió con su sensibilidad los cotidianos avatares de nuestra sociedad. Nos baste recordar un pensamiento suyo cuando se alejó de la ciencia por considerarla "amoral". Moralidad social, eso es lo que tuvo Sábato. Y volcó en su obra, muchas veces ácida, corrosiva, "doliente" todos los males de la humanidad que le corroían. ¡Felicitaciones !
    Susana Luchelli
    Argentina
    C.A.B.A

    juan carlos iribarren01/05/2011 22:42:25

    AMIGOS COMPARTIENDO PLENAMENTE EL HOMENAJE A ERNESTO SABATO, LES ENVIO MIS SALUDOS, CON EL PESAR POR LA PARTIDA DE UNO DE LOS MAS IMPORTANTES HOMBRES DE LA LITERATURA ARGENTINA, TAMBIEN UN DEFENSOR DE LA LIBERTAD, DEL RESPETO A LAS INSTITUCIONES Y EJEMPLO DE ETICA, QUE DEBIERAN EJERCITAR MUCHOS DE LOS QUE HOY ESTAN EN LOS PODERES DE LA PATRIA

    Carlos Romero Henriquez01/05/2011 20:10:39

    si es elocuente el saludo/despedida de Rodolfo, si se me permite lo es aún más el de Eduardo y su comentario de la estancia en Salta del maestro Sábato, que supo como toda gran persona e intelectual sin ataduras ideológicas, revisar y dar un giro a sus originarios pensamientos.
    Un saludo.

    ADOLFO ZABALZA01/05/2011 18:57:14

    AMIGOS EDUARDO Y RODOLFO, NADA PUEDO DECIR YO QUE NO HAYAN DICHO LOS QUE SABEN, SOLO RECORDAR QUE LA "PLUMA CRIOLLA" ESTA DE DUELO POR LA MUERTE DE UN GRANDE DE LAS LETRAS.- GRACIAS POR TAN DIGNO RECORDATORIO.- vasco

    Justo Barboza01/05/2011 17:02:33

    Felicitaciones y abrazos al dúo Eduardo-Rodolfo.

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